Era el año 1969, en una época de protestas sociales por cuestiones de derechos civiles y de representación. Esas protestas tuvieron eco en la UCLA, donde los estudiantes mexicoamericanos exigían un mejor acceso a la educación superior, así como mayores recursos dedicados al estudio de la presencia mexicana en Estados Unidos.
El Centro Cultural México-Americano de la universidad se creó para apoyar la investigación en lo que entonces era el nuevo campo de los estudios chicanos. (Chicano es un término que se refiere a un estadounidense de origen mexicano). En los 52 años transcurridos desde entonces, ese centro -conocido ahora como Centro de Investigación de Estudios Chicanos (CSRC) — ha pasado de ser una pequeña iniciativa dirigida por estudiantes y profesores a convertirse en un centro académico de pleno derecho, que apoya la investigación y las publicaciones originales, el mantenimiento de colecciones de archivos y una biblioteca.
Al frente del centro durante los últimos 19 años ha estado Chon Noriega, profesor del departamento de cine, televisión y medios digitales de la UCLA, que ha sido un incansable defensor de la representación chicana.
Archivos clave relacionados con figuras como Edward Roybal, que en 1949 se convirtió en el primer latino elegido para el Ayuntamiento de Los Ángeles desde 1881 (y más tarde representante de Estados Unidos), así como documentos históricos y fotografías relacionadas con publicaciones como el diario en español La Opinión y el periódico activista de la década de 1960 La Raza (que generó una exposición en el Museo Autry del Oeste Americano), son algunas de las adquisiciones que Noriega ha aportado al centro de investigación.
Ayudó a lanzar “A Ver”, una serie de monografías de artistas que ha dado cuenta del trabajo de importantes artistas latinos como Pepón Osorio, Judith F. Baca, Carmen Lomas Garza y Gronk (nacido como Glugio Nicandro).
También ayudó a curar importantes exposiciones relacionadas con el arte chicano y latino. Entre ellas, la muy influyente “Phantom Sightings: Art After the Chicano Movement”, que organizó con Rita González y Howard Fox en 2008, así como “Home - So Different, So Appealing”, una exposición colectiva de artistas internacionales, realizada con Mari Carmen Ramírez y Pilar Tompkins Rivas, ambas expuestas en el Museo de Arte del Condado de Los Ángeles.
Ahora, después de 19 años, Noriega deja el cargo de director del Centro de Investigación de Estudios Chicanos (aunque permanecerá en la facultad de la UCLA). En esta conversación -que ha sido editada para que sea más clara- repasa el trabajo de dos décadas: las importantes adquisiciones, el ardiente memorándum que una vez envió a la dirección del Museo Whitney de Nueva York y aquella vez que un director de cine al que había pasado años intentando localizar se presentó en su casa con la última copia que quedaba de una rara película chicana.